Este puente tenía ganas de experimentar. Tenía un paquete de manteca de cerdo, porque había echado el ojo a varias recetas que la llevaban, pero no había conseguido reunir el valor para trabajar con un ingrediente nuevo, que no sabía si iba a ser fácil de manipular. Pero es mágico casi: es lo más fácil del mundo.
Y por fin, unas magdalenas como las que se compran. Pero no en mercadona, sino en las panaderías artesanas... porque no es por fardar, pero es que ¡me han quedado de muerte! Las he sacado de aquí, adaptando un poco las cantidades.
Y por fin, unas magdalenas como las que se compran. Pero no en mercadona, sino en las panaderías artesanas... porque no es por fardar, pero es que ¡me han quedado de muerte! Las he sacado de aquí, adaptando un poco las cantidades.
Ingredientes (para 12 magdalenas de molde de silicona):
- 90 g de manteca de cerdo
- 120 g de azúcar
- 3 huevos
- la ralladura de un limón
- un puñadito de almendra en polvo
- 100 g de harina de arroz tamizada
- 20 ml de moscatel de Chipiona (u otro vino dulce)
- almendras picadas crocanti
- azúcar para decorar
- Precalentar el horno a 170 ºC. Enmantecar los moldes de silicona.
- Con batidora eléctrica, batir la manteca con el azúcar hasta que tome un color blanquecino y una textura de crema.
- Agregar los huevos de uno en uno y mezclar bien después de cada uno. Añadir la ralladura del limón y mezclar con varilla manual.
- A parte, mezclar la harina con la almendra rallada y tamizar. Agregar en 3 veces intercalando con el moscatel, con movimientos envolventes sin trabajar demasiado.
- Repartir la masa en los moldes y cubrir con almendras picadas y/o azúcar (para que quede esa costra tan rica de las madalenas artesanas, mmh!)
- Hornear durante 20-30 minutos. Cuando empiecen a estar doradas comprobar con un cuchillo; si sale limpio, ¡están listas!
- Dejar enfriar antes de desmoldar y comer... si puedes aguantar la tentación, claro!
¡Uf! Tienen un aspecto buenííísimo. Te cojo la idea y la próxima vez que haga magdalenas las pruebo... aunque me temo que en lugar de manteca de cerdo usaré aceite ;) Ya te contaré. Besos (y sigue experimentando):))
ResponderEliminarHolas! Me temo que no quedaran con la misma textura, pero ya nos contaras. La verdad es que no me fijo mucho en si engordan o no estas cosas, porque lo que tengo que hacer es ganar peso pues... pero no quedan nada pesadas. ¡Ya me contaras!
ResponderEliminarNo, no es porque engorden, que a mí tampoco me vendría mal, sino porque prefiero no utilizar grasas animales ni ingredientes muy procesados. No, la textura no será igual pero no creo que haya problema, te diré, te diré :) Si te apetece seguir experimentando con la manteca de cerdo, te puedo decir que en un restaurante de mi zona como postre no-lácteo y sin trigo me pusieron una vez una Tarta Saint Honoré (¡me encaaaanta!) con profiteroles hechos con manteca de cerdo y Maizena. Desde el punto de vista nutricional no es lo ideal, pero tengo que decir que estaban muy ricos y tenían una textura muy buena. Y ni que decir tiene que agradecí el detalle inmensamente :))). Besos
ResponderEliminarMmm, los buscaré! Los profiteroles de Santa Fe, cómo olvidarlos... así que cualquier cosa que se parezca me gusta. Y ya me contarás cómo te salen las magdalenas! Un beso, guapa!
ResponderEliminarYuhu!! Recetas de cosas ricas!! muajaja! Ya tengo postres que hacer!! :3
ResponderEliminarPD: Soy sam! jajaja
Con manteca de cerdo¿?, miré la receta original y es mantequilla, sólo que en el otro lado del charco le llaman manteca, je,je,... seguro que ricas si están, pero colesterol..bueno como la mantequilla, je,je, Yo las pruebo con mantequilla, que a la manteca de cerdo la miro de reojo.
ResponderEliminarBicoss
Sami! me alegro de que te gusten! La verdad es que son muy fáciles, y están buenísimas.
ResponderEliminarMarisa: A mi tampoco me convencían, pero como la compré para hacer mantecaos, pos se me ocurrió usarla para más cosas... y aquí están estas estupendísimas madalenas! La verdad es que se me acabaron enseguida... y la verdad es que las grasas, y en particular el colesterol, son necesarias, aunque sea en una pequeña cantidad, pero son esenciales para nuestras membranas celulares: es el responsable de que estén "blanditas", y no se pongan tiesas y acartonadas. Así que de vez en cuando no viene mal :)